Consecuencias de la gestión desintegrada en zonas costeras. Enric Sagristà (CEAB-CSIC) 6/10/2016

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Consecuencias de la gestión desintegrada en zonas costeras
El caso del delta de la Tordera
Enric Sagristà (CEAB-CSIC) 6/10/2016

Enric Sagristà (CEAB-CSIC). Durante los últimos 50 años, la costa catalana ha experimentado enormes cambios debido al crecimiento de la población costera, el incremento de la urbanización y el “boom” turístico. Por éste motivo, los ecosistemas costeros han sufrido enormes presiones que han modificado su estabilidad, cambiando dramáticamente la propia dinámica de cada uno de ellos. En éste sentido, los distintos subsistemas que conforman el “ecosistema playa” han experimentado cambios debido a actuaciones antrópicas que, a pesar de haber satisfecho alguna necesidad humana, han causado efectos muy negativos en zonas que no se consideraban cómo dependientes de ese subsistema, en éste caso en las zonas costeras. Éste proceso es conocido como “Gestión Desintegrada”.
Durante las últimas décadas, tanto la población como las autoridades, han empezado a sufrir los efectos negativos de ésta mala gestión y se han invertido enormes cantidades de dinero público para la recuperación, siempre actuando dentro del subsistema playa y nunca en los distintos subsistemas que lo conforman. Éste trabajo pretende mostrar las consecuencias de ésta gestión desintegrada en la zona del delta del río Tordera (Cataluña), correlacionando las variaciones en la superficie de playa con las actuaciones antrópicas realizadas tanto en la misma playa como en los otros subsistemas involucrados, como por ejemplo el sistema fluvial para, finalmente, hacer una previsión de futuro que ponga de manifiesto la necesidad de una gestión más eficiente y sostenible, una gestión integrada de la zona costera. Durante los últimos 50 años, la costa catalana ha experimentado enormes cambios debido al crecimiento de la población costera, el incremento de la urbanización y el “boom” turístico. Por éste motivo, los ecosistemas costeros han sufrido enormes presiones que han modificado su estabilidad, cambiando dramáticamente la propia dinámica de cada uno de ellos. En éste sentido, los distintos subsistemas que conforman el “ecosistema playa” han experimentado cambios debido a actuaciones antrópicas que, a pesar de haber satisfecho alguna necesidad humana, han causado efectos muy negativos en zonas que no se consideraban cómo dependientes de ese subsistema, en éste caso en las zonas costeras. Éste proceso es conocido como “Gestión Desintegrada”.
Durante las últimas décadas, tanto la población como las autoridades, han empezado a sufrir los efectos negativos de ésta mala gestión y se han invertido enormes cantidades de dinero público para la recuperación, siempre actuando dentro del subsistema playa y nunca en los distintos subsistemas que lo conforman. Éste trabajo pretende mostrar las consecuencias de ésta gestión desintegrada en la zona del delta del río Tordera (Cataluña), correlacionando las variaciones en la superficie de playa con las actuaciones antrópicas realizadas tanto en la misma playa como en los otros subsistemas involucrados, como por ejemplo el sistema fluvial para, finalmente, hacer una previsión de futuro que ponga de manifiesto la necesidad de una gestión más eficiente y sostenible, una gestión integrada de la zona costera. Seminaris del Centre d'Estudis Avançats de Blanes (CEAB-CSIC). 6 d'octubre DE 2016.